Y allí afuera, hay mucha gente dolida, pero no las justifico, a mi me han pesado muchas vidas y sin embargo nunca jodí a nadie.

Todo esto lo pienso, mientras subo el volumen y me coloco un poco de musiquita en los oídos, ignorando toda tu porquería.

Estuve pensando demasiadas cosas, en cómo te cuido, y a su vez, cómo te descuido, haciendo el mismo recorrido, tengo la cabeza yendo a velocidades increíbles.

No sé si todo lo hago mal, pero sí que en el maldito intento de crear situaciones las rompo.

Yo! que me creo autodestructora, sí, lo que toco lo armo, lo rompo, lo armo, lo rompo.

En definitiva, a partir de ahora, te dejo ser, que hagas, que decidas, mientras me quedo mirando para otro lado, ya somos adultos y no puedo cuidarte, no me sale, sobresale.

Voy a terminar convirtiéndome en una vieja sobreprotectora, insoportable y horrible. No quiero.

Me drogo para relajarme, y no, me contracturo mucho más, te miro todo el tiempo, siento que siempre estás peor y sos más inconciente, entonces, me freno, callo, observo.

A la mierda con todo, con las putas dependencias, yo no quiero más.

Resumamos, resumamos.

La humanidad está jodida, y yo me asquee de la mía, de ellos.